Rencor.

Renuncié con pesar
a conjugar
tu verbo ladino.

Olvidé con fervor
el rincón
donde enjuagabas
tus cautivas lágrimas.

Enterré con pasión
tus sórdidas
palabras divididas.

El pasado pasó
engullendo mi
hoy presente.

Acorralado.

Claudica el desencanto,
se lamenta la fortuna
muerde la verdad inoportuna.

Entretanto,
tu lasciva mirada impugna
el ansia de mi hambruna.

Baile gris de colores,
enjambres sin honores
besos sin rencores.

La suerte murió sin suerte,
el olvido gatea inerte
rezo por tenerte.....

Candidez.

Luz que
a trona el
verso que
tus labios
fortalecen.

Eco de silencio
plasmado en
la frontera
de la más
ingrávida indiferencia.

Dejas pasar
el vuelo del
besos enquistado,
tu lengua demarca
el sentido
del primer
rubor.

Recaída.

Dolor en el pecho
ajeno,
sobrevive la
tortuosa realidad.

Congojas y vagidos
bautizan la triste
soledad.

Se refleja el
instinto en cada
latido distinto.

No hay corazón
que llore
tanta
frustración...

Pronóstico.

Mortal salto hacia
atrás,
huellas retrocediendo,
memoria sin
clima fijo,
predice el fatal
devenir.

Recuerdos y
arco iris de imágenes,
bailan en la cuerda
floja,
la vida tira,
tú no cedes,
no hay límites
para el piadoso
miedo.