Mendigo los versos que nunca escribíste,
los párpados de tus ojos hipnotizan este pergamino
donde siempre soñé tu palabra como el último embuste,
la añoranza de la fé sin bonanza es pésimo camino.
Transcurrieron ciegos poemas que no dejaron huella,
la flor pierde su genuino aroma haciendo mella
en un jardín repleto de sutíles despropósitos
que son regados bajo la ciega mirada de tus acólitos.
Seguidores convertidos en inquisidores,poemas intrusos,
son el objetivo de unos besos risueños,ilusos
el final de tu destino es el comienzo de mi calvario
aún así no hay estrella que brille como tú en este sistema planetario.
los párpados de tus ojos hipnotizan este pergamino
donde siempre soñé tu palabra como el último embuste,
la añoranza de la fé sin bonanza es pésimo camino.
Transcurrieron ciegos poemas que no dejaron huella,
la flor pierde su genuino aroma haciendo mella
en un jardín repleto de sutíles despropósitos
que son regados bajo la ciega mirada de tus acólitos.
Seguidores convertidos en inquisidores,poemas intrusos,
son el objetivo de unos besos risueños,ilusos
el final de tu destino es el comienzo de mi calvario
aún así no hay estrella que brille como tú en este sistema planetario.