Feliz Navidad,Feliz Poesía.

Hoy, voy a dejar descansar la poesía y les voy a escribir una reflexión propia,una creencia personal,íntima a veces...y sincera.

Llegan las fiestas de las metáforas,del laudatio prolongado,época de hipérboles rociadas de nieve,fechas de frágiles pensamientos,de nubosas creencias hermanadas con falsas promesas que desbordan versos inconexos.
Entra el altruismo por la puerta grande,enormes dispendios,fastuosos banquetes,ovíparos manjares en mesas viudas de leales sentimientos,los renglones salen torcidos ya en su orígen cuando la mano manca los escribe.
Personalmente y poeticamente,no creo en dioses ni en reyes ( santa clauses incluidos),ius sanguinis me lo impide,no creo, para nada,en cunas de paja con inquilinos de dudosa moralidad,no creo,para nada,en vírgenes perpétuas,no creo, para nada,en san josés carpinteros de estrellas fugaces y fantasmales.
Sin embargo para que no me tachen de incrédulo si creo en otros personajillos,individuos de ética y palabra elegida,flaquea mi corazón al leer a Melchor Verlaine,cruje mi cuerpo al leer a Gaspar Rimbaud,qué decir de Baltasar Machado....no me olvido de los pastorcillos, apellidados Lorca, Cernuda,Salinas,molineros tan distinguidos como Hernández, Jimenez,panaderos tan ilustres como Mallarmé,Villaespesas,Guillén...a todos ellos los tengo grabados a fuego y agua en el belén de mis recuerdos, los otros,aquellos que nos quieren vender desde tiempos ancestrales, por medio de trucos de mágia barata y púlpitos dominicales,incluidas las herencias vaticanistas,salvadores de nuestros pecados,de nuestrso errores,navegan en la difuminada calima de mi olvido.
Quizás tenga un problema de conciéncia,quizás perdí pronto la inocéncia,quizás, sólo quizás,la ingenuidad fueron ropas prematuras que la tristeza real, la no asumida,robaron pronto de mi cuerpo,no lo sé,pero lo que aprendí de esta largo camino, bautizado con el nombre de vida,es que nada es gratis y que todo viaje,largo o corto tiene que pagar su peaje.Iglesia dixit.
Y puestos a ser rebeldes con causa,lo que no admito bajo ningún pretexto, bajo ningún palio,es que nadie me convierta en títere, marioneta de sus creencias,mucho menos en fechas acotadas por su interés, por su falsa necesidad, por su soberbia.No soy oveja que sigue el rebaño,mi pluma y mi confeso verso son autodidactas.La palabra feliz,es demasiado grande, conspicua en su significado,para encasillarla en unos días concretos,en unas fechas irreales para quién les escribe.
Evidentemente,esto es cuestión de gustos,de pareceres, en una palabra de respeto,por eso mismo, es una cuestión de elección, propia de nuestra vida,y a todos aquellos que gustosamente y no tan gustosamente,me reciben y me despiden con un Feliz Navidad, siempre les respondo,Feliz Poesía, sin más....